La Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía ha ampliado el del protocolo frente a la listeriosis recomendando tratamiento antibiótico en todas las mujeres embarazadas que hayan comido algún alimento de la marca La Mechá, causante del actual brote de listeriosis. 

El protocolo previo, que consiste en un tratamiento con amoxicilina y está avalado por ocho sociedades científicas, ya incluía a las mujeres embarazadas con síntomas de infección leve, con el objetivo de reducir el riesgo de pérdida del embarazo y/o la infección del recién nacido. 

El Servicio Andaluz de Salud está informando sobre el nuevo protocolo a los profesionales de salud, particularmente a los médicos de familia y a los ginecólogos, tanto de la sanidad pública como privada, para que contacten con las mujeres que llevan el control del embarazo en su consulta y valoren si necesitan o no el tratamiento antibiótico en función del riesgo.

En el caso de que la embarazada haya consumido algún producto que pudiera estar contaminado -o si no lo recuerda-, e independientemente de si tiene o no síntomas, el médico decidirá  si necesita tratamiento con amoxicilina utilizando  un algoritmo que estima el riesgo de infección y en función del mismo la recomendación a realizar.

Según ha explicado el portavoz del gabinete técnico creado por la Consejería de Salud y Familias para el seguimiento del brote de listeriosis, José Miguel Cisneros: “la amoxicilina es eficaz en el tratamiento de las infecciones producidas por Listeria monocytogenes y es segura durante el embarazo”.

Las sociedades científicas que avalan este procedimiento son: la Sociedad Andaluza de Ginecología y Obstetricia (SAGO), la Sociedad Andaluza de Microbiología y Parasitología (SAMPAC), la Sociedad Andaluza de Medicina Familiar y Comunitaria (SAMFyC), la Sociedad Andaluza de Epidemiología (SAEPI), la Sociedad Andaluza de Medicina Preventiva y Salud Pública (SAMPSP), la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), la Sociedad Española de Médicos Generales (SEMG) y la Sociedad Andaluza de Enfermedades Infecciosas (SAEI).

Por qué es peligrosa la listeriosis en las embarazadas

La listeriosis es una infección que se contrae por comer alimentos contaminados por la bacteria listeria monocytogenes, que se encuentra en la tierra y el agua.

La bacteria puede estar presente en los numerosos alimentos crudos, pero también en alimentos procesados y en alimentos elaborados con leche no pasteurizada.

Los síntomas de la listeriosis son parecidos a los de gripe: malestar general, dolor de cabeza, fiebre y escalofríos, dolor de cabeza, malestar estomacal, diarrea y vómitos. Además, pueden tardar semanas en aparecer.

En las embarazadas, la infección puede ser muy peligrosa si no se trata a tiempo, ya que puede atravesar la placenta y transmitirse al feto y  llegar a provocar un aborto espontáneo, muerte fetal, parto prematuro, o infecciones muy graves en el recién nacido.

Esta es la razón de que se trate de forma preventiva a todas las embarazadas que hayan podido comer producto infectado.
Aunque el brote principal de listeriosis se asoció a la carne mechada, pocos días después La Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AECOSAN) amplió la alerta a otros productos de la marca y finalmente por precaución,  la AECOSAN aconsejó no consumir ningún producto de la marca La Mechá.

El brote de listeria no ha terminado

Hasta el momento se han confirmado 205 casos  de listeria confirmados en Andalucía y 213 en toda España, desde el inicio de la alerta, decretada el 15 de agosto.

La evolución del número de casos nuevos diarios se ha reducido de manera significativa y sostenida desde el día 23 de agosto.

El portavoz del gabinete técnico creado por la Consejería de Salud y Familias para el seguimiento del brote de listeriosis, José Miguel Cisneros ha destacado que «el brote aún no ha terminado y que se espera que aparezcan casos poco frecuentes durante varias semanas que afectarán principalmente a la población de riesgo: embarazadas, pacientes inmunodeprimidos, con enfermedades crónicas y ancianos” y ha recordado la importancia de consultar con el médico si se ha consumido alguno de los alimentos contaminados, especialmente en el caso de pacientes, con enfermedades crónicas y a los ancianos.

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