Según se ha puesto de manifiesto en la convención anual de la Asociación de Psicología de Estados Unidos, la depresión posparto no es exclusiva de las mujeres sino que también afecta a los padres primerizos.
En concreto, según manifestó el doctor Dan Singley, del Center for Men’s Excellence, las investigaciones recientes han mostrado que aproximadamente el 10% de los padres primerizos experimenta depresión posparto, y hasta el 18% de esos mismos papás pueden sufrir algún tipo de trastorno de ansiedad tras el nacimiento del bebé.
Las declaraciones de este experto se pueden consultar enlace de la Asociación Americana de Psicólogos
¿Depresión posparto en los padres?
No sé si estas cifras se refieren a la verdadera depresión posparto que se prolonga en el tiempo y requiere tratamiento médico o a la tristeza después del parto que sufren muchas madres recientes durante una o dos semanas (que en inglés se denomina maternity blues o baby blues: días azules) a consecuencia cambios hormonales, el agotamiento e insomnio de los primeros días, las molestias del puerperio y todos los cambios que se producen de golpe con la llegada del recién nacido.
Pero lo que sí es cierto es que ahora que el padre participa más en la crianza del bebé desde los primeros días, en parte gracias a un permiso de paternidad que poco a poco se ha ido ampliando, también acusa más todos los cambios que supone la llegada de un hijo.
Y es que aunque el nacimiento de un hijo es una vivencia maravillosa, supone cambios importantes en la vida diaria (las rutinas, las tareas, el espacio en casa…), en la economía doméstica y en las relaciones con la pareja, la familia y los amigos. Por no hablar de la falta de sueño y el cansancio, dos factores que alteran el ánimo de cualquiera
De repente, para la madre, pero también para el padre, todo gira en torno a un recién nacido indefenso que depende totalmente de nosotros y que no sabe decirnos lo que le pasa.
Con todos estos cambios, igual que las madres, los padres, especialmente los primerizos, pueden tener alteraciones emocionales después del parto y sufrir irritabilidad e insomnio. Y es que, según el experto del Center for Men’s Excellence, los síntomas de la depresión posparto en el hombre son diferentes a los de la madre., Ellas suelen manifestar tristeza y llanto frecuente,mientras que los padres, sobre todo, suelen mostrarse irritables y desconectan socialmente.
Pocos estudios sobre la depresión posparto en los padres
El informe presentado en la Convención anual de la Asociación de Psicología de Estados Unidos resalta también que se han hecho muchas investigaciones sobre el estrés y la depresión posparto en las madres, por ejemplo se ha comprobado que el ejercicio en el embarazo ayuda a prevenir la depresión posparto, pero hay pocos estudios las tasas de prevalencia, causas, consecuencias y tratamiento de problemas de salud mental en los padres primerizos, porque además los hombres son reacios a buscar ayuda cuando les ocurre.
Sin embargo, buscar ayuda y sobre todo hablar de ello con otros padres que estén pasando por las mismas vivencias es la mejor opción para prevenir y aliviar la ansiedad que puede producir todos los cambios que se producen cuando nace un hijo.
En este sentido, en España existen algunos programas en en hospitales públicos para prevenir la depresión posparto en la mujer e incluso unidades específicas para tratar la depresión posparto. Además los cursos posparto que se realizan en los ambulatorios de la Seguridad Social, a los que generalmente también pueden asistir los padres, son una excelente opción para conocer a otras familias que está pasando por lo mismo y al mismo tiempo consultar dudas y miedos con la matrona que los organiza.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR
Hola, me ha parecido un post muy interesante ya que no se habla mucho de la depresión de los padres después de la llegada de un bebé. En mi caso lo experimenté con mi segundo niño, nació por cesárea lo cual me puso aún más problemas para recuperarme y mi esposo la llevo bien mal. Llegó el momento en que tuve que pedir ayuda porque él estaba bien agobiado y super agotado.
Gracias, un abrazo