Hace tiempo que se sabe que practicar ejercicio en el embarazo tiene muchas ventajas para el desarrollo del embarazo (reduce el riesgo de sufrir diabetes gestacional)  y el parto y para la salud de la futura madre: reduce el riesgo de depresión posparto. A estas ventajas se suma ahora que el ejercicio mejora la salud del niño en sus primeros años de vida, según se ha puesto de manifiesto en un estudio publicado recientemente.

El estudio, llamado “Gestational Exercise and Maternal and Child Health: Effects until Delivery and at Post-Natal Follow-up” en el han participado los investigadores de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la Universidad Politécnica de Madrid UUPM) se ha publicado en la revista Journal of Clinical Medicine.

Para llevarlo a cabo se hizo el seguimiento de más de 1.300 embarazadas y sus hijos durante los 10 años siguientes al parto.

Beneficios de practicar ejercicio del embarazo en la salud del niño y la madre

1 El ejercicio en el embarazo previene el sobrepeso y la obesidad en el bebé

El estudio ha demostrado que realizar ejercicio físico en el embarazo ayuda a prevenir el sobrepeso y la obesidad durante el primer año de vida.

2 El ejercicio en el embarazo reduce las complicaciones cardiacas y metabólicas en la madre (que pueden ocasionar daños en la salud del bebé)

Además, el ejercicio en el embarazo reduce la incidencia de complicaciones cardio-metabólicas maternas después del parto para las madres, entre ellas la hipertensión o la diabetes.

Según explica Rubén Barakat, investigador del grupo de Actividad Físico-deportiva en Poblaciones Específicas (AFIPE) de  INEF-UPM y uno de los autores de este trabajo; el estado de salud de la madre no solo influye de forma positiva en el bebé. “Algunas alteraciones, especialmente las de carácter metabólicas han sufrido un importante incremento a causa de estilos de vida inadecuados y pueden ocasionar daños en la salud del feto e incluso del recién nacido, que se prolongan más allá del momento del parto”

Además, de los análisis secundarios del estudio se concluye que las mujeres sedentarias que empiezan a hacer ejercicio durante el embarazo son las que más beneficios obtienen, tanto para su salud como la de sus bebés

 

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