Según el último informe sobre el consumo alimentario, en España todavía tomamos demasiados alimentos ricos en azúcar y grasas que presentan una capacidad saciante menor. En su lugar, la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) aconseja tomar pescado, carne y legumbres por su valor nutricional y por ser alimentos con mayor poder saciante.
Según explican desde la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, el Informe sobre el consumo alimentario en España, presentado recientemente por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, muestra que en España existe una tendencia hacia “la simplificación del menú y hacia los métodos de cocinado más rápidos y saludables”.
En concreto, durante 2018 se ha registrado un mayor volumen de consumo de frutas, hortalizas, patatas frescas, agua envasada, leche y derivados lácteos.
- Por un lado, está aumentando el consumo de productos listos para el consumo, con una preferencia por la compra de productos como el aceite de oliva virgen extra o chocolates con mayor contenido de cacao.
- Por otro, se está reduciendo la ingesta de azúcares y proteínas de origen animal.
Pero también se está produciendo un descenso en la adquisición de alimentos tradicionales como la carne, pescados frescos y congelados, mariscos y moluscos, frutas secas, y pan.
A la vista de este descenso, la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) ha recordado que es necesario implementar hábitos de alimentación saludables y seguir un patrón de dieta mediterránea para prevenir enfermedades crónicas y mantener un estado de salud óptimo.
Según explica el doctor Francisco Botella Romero, miembro del área de Nutrición y vocal del área asistencial y de comunicación “aunque las tendencias que reflejan el estudio del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación indican un cambio en los hábitos de alimentación de los españoles, todavía existe una preferencia por el consumo el consumo de alimentos ricos en azúcar y grasas que presentan una capacidad saciante menor”, apunta Francisco Botella Romero.
Pescado, carne y legumbres, entre los alimentos con mayor poder saciante
Según explica el doctor Botella. “La sensación de saciedad está determinada por la coordinación de sistemas hormonales gastrointestinales y de neurotransmisores químicos en diversas áreas específicas del cerebro”.
Esto significa que en el índice de saciedad influyen factores como la densidad energética, el porcentaje de proteínas sobre las calorías totales, la cantidad y el tipo de fibra.
El área del cerebro que controla el apetito es el hipotálamo, zona encargada de “enviar mensajes del tipo: tengo hambre o no tengo apetito”.
El experto explica que el consumo de alimentos en el ser humano está muy influenciado por patrones culturales, hábitos horarios, circuitos de `recompensa`, y sensaciones cerebrales placenteras que tienen poco que ver con la nutrición y mucho con patrones de conducta ancestrales que nos remontan a épocas de escasez y a adaptaciones de supervivencia frente a circunstancias adversas.
Según explica el endocrinólogo, cuando ingerimos alimentos “placenteros – ricos en azúcar y grasa- se activan determinados neurotransmisores que tienen relaciones complejas con estados de ansiedad, depresión o de compensación frente a frustraciones o inhibiciones psicológicamente relevantes”.
Al hablar de alimentos placenteros, el experto se refiere a los refrescos, las patatas fritas, los pasteles y los helados, frente a otros alimentos que destacan por su valor nutricional con un mayor contenido en proteínas o en fibra, que se caracterizan además por su mayor poder saciante, como las carnes y pescados grasos, frutos secos y legumbres.
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